Estudiar Homeopatía fue un anhelo desde que me recibí. Diversos motivos me llevaron a concretarlo recién ahora. Antes de anotarme en Vitalis, hice un recorrido por todos los lugares que ofrecían cursos y gracias a un colega concurrí a la cátedra y me di cuenta que era lo que estaba buscando. A mi entender, es la escuela más abierta, carente de egoísmo para compartir el conocimiento y que da la posibilidad de adquirir una experiencia difícil de alcanzar en otros lados. Los docentes son sólidos y dispuestos a responder y brindar todo lo que saben con humildad, con un trato de pares no poniéndose en ningún pedestal. En cuanto a las enseñanzas del Dr Cámpora, para mi es muy destacable que alguien con tanto talento para la Homeopatía, haya elegido transmitir el conocimiento, formar gente, profundizar el estudio de los remedios revisando las materias medicas, etc. Es un apasionado y eso lo transmite y contagia.
Por situaciones personales tuve que faltar un tiempo y me dieron la posibilidad de recuperar las clases con los videos, algo que es muy favorable.
Para concluir, a lo largo de este año comprendí que la Homeopatía es difícil, compleja, que se necesita del estudio constante y a pesar de todo, siento a partir de lo vivido en la cátedra, que es posible para mi ya que las enseñanzas dan herramientas concretas y prácticas. Muchas gracias!